12 noviembre 2011
Soy GEMMA GALGANI. Hermanas y Hermanos, que la Paz sea y que la Luz vibran en nuestros Corazones. Vengo a, hoy, para expresarme como portadora de la Vibración Unidad, con el fin de dar un determinado número, no de detalles sino de generalidades relativas al proceso, en sí mismo, nombrado Ascensión. Intentaré expresar las palabras que son las más justas para un proceso que está eminentemente vinculado a la experiencia y al vivido y que no puede traducirse con palabras sino difícilmente. Pero colocaré, hasta cierto punto, las bases de lo que serán dadas y desarrolladas, posteriormente, por los Antiguos, por otras Estrellas o por Arcángeles, en función, si puedo decir, del grado de desarrollo del establecimiento de la Luz, sobre este mundo. En resumen, podría decir que existen tantos mecanismos ascendentes que de seres humanos y podría, por eso, decir, en resumen, que la Ascensión es un único mecanismo relativo a la totalidad de la humanidad. Comprenderán fácilmente que todo depende de la opinión de la cual se puede colocarse para hablar de un determinado fenómeno y de tal mecanismo. La opinión colectiva corresponde, efectivamente, en un momento dado, preciso, localizable, autentificable, por el conjunto de la colectividad humana, que eso esté en este cuerpo o también en lo que permanece de la matriz astral para los que tenemos hábito de llamar el desencarnados, formando parte de este ciclo de experimentación, este ciclo de encerramiento (qué más da el nombre que le damos). Exactamente antes mi, nuestra hermana MI (ndr: intervención del mismo día de MA ANANDA MOYI), mencionó una serie de procesos relativos a la alternancia de dos conciencias. El proceso de la Ascensión, en sí mismo, es precisamente el momento en que esta alternancia, con carácter individual, finaliza, para ustedes, individualmente. Permitiéndoles entonces establecerles en su pasar a ser Vibratorio, hasta cierto punto, a la espera de (y esta palabra espera no es anodina) el proceso colectivo que, por supuesto, le es sincrónico para el conjunto de las conciencias, presentes de este lado de la vela como del otro lado de la vela (en las puertas de la muerte astral, para los hermanos y las hermanas que están sin cuerpo, por el momento).
De manera muy pertinente, muchos seres humanos, hoy, viven Estados que los hacen pasar, como lo decía, de un estado a otro. Vendrá bien un momento (que quizá ya vino, para algunos de entre ustedes) donde, cualesquiera que sean las fluctuaciones de Luz pudiendo presentarse a ustedes (que eso esté en las Alineaciones, en sus meditaciones o en actos totalmente diarios), dónde esta fluctuación, este cambio de un estado a otro, no existirá simplemente ya. Es decir serán, de manera constante y en la mayor parte de su vida, en un estado dado. Este estado dado va a corresponder, en primer lugar, a la permanencia, más o menos completa, se llamaron algunos mecanismos correspondiendo a lo que las Coronas (Corona Radiante de la Cabeza y Corona Radiante del Corazón). Vendrá un momento en que las fluctuaciones vinculadas a momentos, localizables o no, dónde la intensificación de la Luz Vibral es manifiesta, donde no harán ya la diferencia entre estos momentos allí y, precisamente, los momentos ordinarios. Una vez más, que eso se refiere a la Corona de la Cabeza, la Corona del Corazón o también el Sacrum. En paralelo a eso, constatarán, muy fácilmente, que lo que constituye el conjunto del cuerpo de deseo (que eso esté a través del cuerpo, a través de las emociones, a a través de misma del mental y de la razón), que no hay más oscilación, que su humor, que su estado va a permanecer en una determinada estabilidad. En esta estabilidad, no habrá más de manifestación de cualquier cuestión, de cualquier deseo. En ese momento, ustedes mismos se sorprenderán al no desear nada y a estar, simplemente, en la aceptación total de esto que están viviendo, sin exaltación, sin posibilidad de plantearse la menor cuestión, sobre el futuro, sobre el pasado o sobre el sentido incluso de lo que se da a vivir, en este momento allí. En resumen, se puede decir que en un momento dado, el mecanismo mismo de los barros comunicantes, palabras empleadas por MI, no existirán simplemente ya porque la conciencia estará en un equilibrio. Este equilibrio es un equilibrio que no es aún el mecanismo de la Ascensión colectiva final sino que contribuye en gran parte, con carácter individual, a establecerlo, por La Tierra, en el momento de su elección. A través de este estado (en el cual serán, una vez más, a su hora, si puedo emplear estas palabras) será, hasta cierto punto (y, allí también, reanudo la expresión de MI), la fase vibratoria. Esta fase que no es un juicio porque la Luz es justa y ella no puede juzgar, no puede sino constatar. Y eso les permitirá constatar ustedes mismos lo que permanece en este estado estable. Entonces, la comprendieron, existe una amplitud de los movimientos y oscilaciones que conseguirán (a su término que es el vuestro) una estabilidad y en consecuencia una forma de permanencia de la conciencia, ella misma, en un estado o en otro. Cualquiera que sea, en ese momento, lo que se derivará, eso será, muy exactamente, para ustedes, lo que es justo y la frase más adaptada a su conciencia. Permitiendo entonces, en el momento colectivo, consultarse en el justo estado de su pasar a ser. Entonces, por supuesto, allí también, y según el estado de su conciencia (a su término que es el vuestro), se derivarán los distintos mecanismos posibles de la Ascensión. Algunos de entre ustedes, o se los mostraron, o ya están entre reseñas, o fueron objeto de especulaciones, de distintas maneras.
Lo que debe retenerse, y que es esencial, es que, en este momento colectivo, cuyos nulo no conoce la fecha, ustedes serán todos (de manera milagrosa, si se puede decir) absolutamente sincrónica con su propio Pasar a ser. No puede ser diferente y no podrá ser diferente, en ese momento. La inteligencia de la Luz es total. Respeta completamente su Libertad de ser. Su Libertad de ser pasa por la libertad total, de cada ser, y por la aceptación, total, que durante este momento colectivo, se eleva cada conciencia, muy precisamente, a su justo lugar, que este justo lugar tome uno de los aspectos posibles de las distintas ascensiones. ¿Cuáles son estos distintos aspectos posibles? Serán los siguientes, haciendo hincapié al mismo tiempo en el hecho de que no habrá ninguna interrupción de la propia conciencia. Es decir, lo que conocen, aún hoy, como la alternancia víspera-sueño, por ejemplo (dónde, más allá del estado de sueño, ningún recuerdo consciente surge de la noche), no existirá simplemente ya. Vendrá simplemente un momento en que la conciencia no podrá ya en ningún caso borrarse o pararse, de ninguna manera que sea. Que eso esté por la alternancia víspera-sueño, que eso esté por las fluctuaciones (hasta cierto punto, normales) de la integración de la Luz, en estos momentos allí, la conciencia será una, permanente e indivisible, traduciéndose en distintas consecuencias, para cada uno, según, precisamente, esta famosa frase Vibratoria.
Algunos verán su conciencia y el cuerpo, en los cuales son, elevarse, real y concretamente, del suelo, por rayos de Luz blanca, a su destino. Eso se refiere a las conciencias que hicieron la elección, desde hace mucho tiempo, más allá de la frase, de acompañar esta Dimensión hasta su extremo límite, con el fin de recibir los códigos que llamaría de siembra (que se desarrollará posteriormente) de la Nueva Dimensión de vida, llamada Quinta Dimensión o más allá. Retengan que el proceso que a ustedes describo será simultáneo y sincrónico, aunque, por supuesto, existe y existió, desde las Bodas Celestiales, la posibilidad, para algunas conciencias (y, en particular, sobre otros continentes distintos de Europa), de experimentar la plena conciencia, sin el cuerpo, permaneciendo al mismo tiempo en esta Dimensión y de pasar a ser, hasta cierto punto, lo que la mirada de la personalidad podría llamar, de manera divertida, un fantasma (pero que no lo es).
Otras conciencias elegirán, por la frase Vibratoria, dejar la Luz disolver, enteramente, el conjunto de las últimas ilusiones, descubriendo la conciencia en su nuevo cuerpo: la oruga se convierte en entonces mariposa, enteramente. La oruga no será un despojo sino, hasta cierto punto, transmutada y fagocitada, directamente, por la Luz. La conciencia se encontrará entonces en disolución, en la Luz, en el Cuerpo de Luz, sin ninguna interrupción de conciencia, sin ninguna dificultad. El choque de la humanidad, para estas conciencias allí, se reducirá a su más simple expresión, como en el momento del despertador después de un sueño, directamente de un estado a otro sin poder, en el primer tiempo, hacer de diferencia entre el frente y el después de este acontecimiento.
Para las conciencias cuya sentencia vibratoria es la perpetuación del alma, durante cierto tiempo, la perpetuación de este cuerpo (cualesquiera que sean las razones que ninguna conciencia tiene que juzgar), entonces el camino podrá ser diferente. Podrá tener allí embarque de este cuerpo por Fuerzas que llamaremos (de manera ancha, y es voluntario, hoy) Fuerzas de la Confederación Intergaláctica de los mundos Libres, teniendo informe y perteneciendo al mundo destinados carbonados Unificados, como algunos de nuestros hermanos por los que se ha sido referido: pléïadianos, végalianos, arcturianos, por ejemplo.
Para otras conciencias llamadas, cuya libertad corresponde a la perpetuación de la conciencia, más allá de este cuerpo, en una estructura carbonosa, habrá, en ese momento, contacto con la Luz, establecimiento de la Unificación, no disolución del alma pero, conciencia del alma y la conciencia, sí mismo, de vivir la experiencia deseada en un nuevo cuerpo. Este nuevo cuerpo no pasa absolutamente por las puertas del olvido (llamadas el nacimiento, sobre este mundo), como todos lo vivimos sino como la continuación de la conciencia en lo que pasó a ser, en la edad y en la conciencia de la frase Vibratoria del momento, permitiendo entonces al alma perpetuarse, el tiempo necesario que juzgará oportuno de concederse con el fin de encontrar la Libertad total. El conjunto de estos procesos se refiere al conjunto de la vida, de este lado de la vela, como para los almas que están en espera de este momento. Tienen la posibilidad, manteniendo al mismo tiempo este cuerpo, a partir de hoy, de acercarse, cada vez más fácilmente, de su frase Vibratoria. Esto permitirá, que estén en la conciencia limitada, o en la Conciencia Ilimitada, de vivir el mismo proceso de absorción de la Luz, cuya consecuencia será, obviamente, diferente, según su Libertad y según lo que ustedes conciben y vibran de la Libertad. Se hará pues, muy exactamente, a cada uno, según su Vibración.
Por lo que se refiere a un gran número de conciencias que no tienen hasta ahora, si se puede decir, ninguna conciencia de los procesos en curso, o una denegación, incluso, absoluta de los procesos en curso, si esta gente forma parte de lo que llaman a sus prójimos, no tengan ninguna inquietud ya que, para cada conciencia, hay un justo plan, un justo destino que no puede en ningún caso ir contra la ley de Libertad. Si, por supuesto, la Libertad de una conciencia es permanecer en la acción-reacción, eso será su Libertad, pero en toda conciencia de lo que es la Luz y de lo que propone la Liberación total, en la Unidad. A partir de este momento allí, o a partir del momento en que habrán concienciado (no por mis palabras, sino por su propia experiencia individual debiendo llevarse durante este período extremadamente corto), no tendrán ya, por supuesto, ninguna interrogación, ningún miedo, contrariamente a lo que pasa habitualmente en el anuncio de su muerte, en este mundo. Lo que viene, una vez más, no es la muerte pero la Vida, en su plenitud, en su Libertad y en cumplimiento de cada conciencia, enteramente.
La acción colectiva de la Luz, por supuesto, pasará por una serie de desapariciones, totales e instantáneas, de una serie de elementos que no existen. Todo lo que se puso en pie, construido (como elemento de protección, como elemento artificial) será borrado simplemente por la Luz. Lo que se borra está estrictamente lo que no existe, y absolutamente no lo que existe (incluso fuera de la Luz) y relativa a la conciencia. Esta certeza se establecerá, en ustedes, aunque, para algunos, inicialmente inicial, eso se traducirá, efectivamente, en un choque o un pavor. Pero el choque o el pavor no será más que un momento extremadamente breve y transitorio que no podrá desembocar en ningún caso en la persistencia de cualquier ilusión, de cualquier sufrimiento o de cualquier alteración de la propia conciencia. En resumen (y como ya se les dijo eso), más el tiempo que pasa y pasa, en este mundo donde son aún, cuanto más se ustedes acerca de su estado de consciencia futuro, y menos permanece tiempo para vivir el choque de la transición. Una vez más, les resultará, cada vez más claramente (que eso esté en la conciencia limitada, como en la Conciencia Ilimitada) que no puede resultar ningún daño, ningún sufrimiento de este mecanismo de paso a la Luz, cualquiera que sea su pasar a ser Vibratorio.
Los de entre ustedes que se desviarán (a justa razón, porque no viven nada) de la Luz vivirán muy exactamente la misma certeza Interior, que aquélla que es los suyos, por lo que se refiere a la Luz. El conjunto de lo que se nombró miedo o compromiso colectivo o individual está en fase de disolución. El anuncio realizado por el Arcángel MIKAËL corresponde, en ustedes, a una nueva dinámica de su conciencia, una nueva dinámica de percepción y distanciamiento, o no, entre la Vibración de la conciencia una y la Vibración, si se puede expresarse así, de la conciencia limitada que es, ella, precisamente, ausencia de Vibración. Sumergirse en el Supramental, volver Luz (cualquiera que sea su mecanismo ascendente, propio e individual), se verá desnudar y quitar (por lo mismo que la desaparición, individual y luego colectiva, del sistema de control del mental el humano) de las emociones que controlarán, de la definición a la personalidad y les permitirá vivir eso sin miedo. El choque, así intentado que allí tenga uno, recuerda, será cada vez más corto, más el tiempo de La Tierra avanzará. No piden pues absolutamente para que las cosas se aceleren, no sean, como el Comendador explicó eso, en la espera, sino en la esperanza ya que es lo que viven, actualmente. Y la esperanza no es una espera, la esperanza es un estado de Vibración en el cual, colocado en el centro de los Cuatro Pilares del Corazón, se realiza el Paso de la Estrecha Puerta. Realizando este paso, individualmente luego colectivamente, se darán cuenta, de manera muy simple, que todas las aprehensiones, que todas las interrogaciones, refiriéndose a la aniquilación de la personalidad o la conciencia limitada, no tendrán ya ningún sentido. A lo sumo se acercarán a este estado (que los concierne individualmente), a lo sumo constatarán eso, en torno ustedes, a lo sumo ustedes sabrán, de manera indudable, que se acercan a este choque.
Les recuerdo (y terminaré sobre estas palabras, no deseando, en este día, abrir un espacio de cuestionamiento, porque numerosas respuestas les serán establecidas por su propia experiencia, desde ahora) que a lo sumo irán hacia esta Vibración, o hacia la denegación de la Vibración, a lo sumo constatarán que las zonas de sombras o las zonas de resistencias, que las zonas de interrogación, se alejan ustedes, de su vida, cada vez más rápidamente. Preparando entonces, por las señales del cielo y La Tierra (que sólo son nada de otro sus propias señales: en efecto, el cielo va a rasgarse, de la misma forma que su sobre cardíaco va a rasgarse), liberando entonces la Esencia de serlo, con el fin de vivir la mariposa. El que desea, por una razón que le es propia y íntima que nulo no tiene que juzgar, seguir siendo oruga, seguirá siendo, sin ningún problema, la oruga que él tiene deseo de pasar a ser.
Lo hemos dicho que este tiempo es el período de la Co-creación consciente: esto no es una inútil palabra, esto no es una expresión o una alusión a cualquier cosa pero la verdad de lo que debe vivirse, para cada uno. La Unidad no es un estado que debe conquistarse, es un estado que se establece. Se establece, como eso fue dicho, por la Gracia y la Comunión cada vez más abundante sobre esta Tierra, para muchas conciencias cada vez más importante. Así pues, solamente las conciencias deseando mantener la antítesis del Amor (es decir, el miedo y el poder) vivirán, en definitiva, la confrontación con la Luz Vibral como un fuego que devorará. Y eso será un fuego que devorará, no para la conciencia, sino para lo que, en la conciencia, se opone ferozmente a la Vida. Ya que la Vida es una, en los mundos carbonosos Libres, como en los mundos pluridimensionales Libres. Lo que viene es la vuelta de la libertad. Lo que viene es Alegría, en ustedes, como para el conjunto de La Tierra. Admita que solo el que no conoce la verdadera Alegría, de la Vibración del Amor y el Corazón, no puede aceptar, mientras no lo haya vivido, la Luz. Pero la Luz se establece para todos: incluso los que querrían retirarse, no podrán retirarse, dónde que sean, cuando se anuncie el momento colectivo.
Entonces, por la acción del Arcángel MIKAËL, por su acción, y por nuestra acción común (de dónde que veníamos, sobre los espacios pluridimensionales, sobre el Multiversos o los Universos), la única finalidad, cualquiera que sea la opinión y la mirada llevada, es solamente la Alegría, la Libertad, el Amor y la Unidad. Cada día que tienen que llevar, debe cumplirse con la Vibración de la Luz o con la ausencia de la Vibración. Pero, cada día (que se refiere, una vez más, a la gran mayoría de la humanidad. No hablo, por supuesto, de las fuerzas ferozmente opuestas a la verdadera Luz, que en gran número es limitado extremadamente con relación a la masa de la humanidad, cualquiera que sea su procedencia estelar, Dimensional, viviendo el encerramiento), la sed de la libertad, expresada y visible a la superficie de esta Tierra, desde el principio de este año, cualquiera que sea el aspecto, a veces no coherente, no hace más que traducir la aspiración de la humanidad a su Libertad y a su Liberación. No es ya tiempo, hoy, de dejar el menor miedo sustituir a la Alegría de la Libertad y la Liberación. Hay exactamente, cualquiera que sea su pasar a ser Vibratorio, que vivir la Alegría plenamente de la Luz. La forma en que vivirán este período, embargan el bien, no dependen, en definitiva y como siempre, que ustedes y solos ustedes pero con una agudeza de la conciencia a nulo otro similar con relación a las experiencias que habían podido llevar, he aquí algunos meses o algunos años de este tiempo Terrestre.
He aquí los algunos elementos que ustedes retransmito, en nombre de las Estrellas, por la Vibración que es mío y suyo. Los especialistas aportarán otros elementos, refiriéndose más directamente a los mecanismos Vibratorios y no solamente de la conciencia Vibratoria, de la conciencia y la Vibración. Elaboré simplemente el boceto general de este proceso ascendente relativo, sin ninguna excepción, al conjunto de la humanidad. Muchos Arcángeles y de Antiguos lo dijeron que se realizaba todo sobre los Universos Unificados. Todo se realiza efectivamente y todo se realizará, sobre esta Dimensión, ahora, de manera más ligera, cualquiera que sea el choque de la humanidad. Hermanas y hermanos personificadas, que la Paz de la Unidad sea, a nunca, su Residencia. La hora de la resurrección es una hora de Alegría. El tormento que su conciencia tiene puede vivirse, en las semanas y los meses transcurridas, para los de entre ustedes sido contratados más lúcidamente, quizá, sobre el camino de la Luz, no tiene juzgarse, condenado o rechazado ya que representó, para ustedes, su camino y su marcha para acceder a eso.
Que la Gracia se vuelva pues para el camino de cada uno, para el Amor de cada uno. La acción de gracia y la Comunión del conjunto de los Despertados de La Tierra va a volver, hasta cierto punto, cada día, la tarea más evidente y más fácil, para la Luz, en su establecimiento total. Terminaré sobre estas palabras, con Amor, para el Amor, y en el Amor de la Luz una. Que la Alegría sea su Residencia. Hasta una próxima vez.
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