¡Saludos desde la Nave Alfa!
Nuestra misión de llevarles a todos
ustedes hacia el conocimiento de nuestra existencia en primer lugar y
luego de cuáles son nuestras acciones y nuestro propósito en este
planeta, está llegando a un momento crucial de extremada importancia.
La Nave Alfa tiene una misión que cumplir dentro del Plan Divino de
suma importancia, y a medida que vayamos pasando a etapas posteriores
y subsecuentes podremos ir informándoles a ustedes a través de
internet, haciendo uso de esta herramienta tan útil para nuestro
propósito de hacerles llegar cada una de nuestras acciones, para que
sean conscientes de ellas.
Queremos hacerlo así, porque deseamos que todos ustedes, los seres
humanos que estén ya despiertos y los que van a ir despertando en
estos tiempos de cambio, entiendan que este cambio de la humanidad a
nivel planetario es algo que nos atañe a todos por igual, tanto los
que son oriundos de este planeta, como los que venimos de muy variadas
distancias siderales, todos juntos, unidos en un solo cuerpo, para
llevar a cabo el cambio dimensional que Dios ha planeado para ustedes
en estos momentos actuales.
Tenemos muchos y variados individuos en el planeta, actualmente
encarnados en un cuerpo físico, que están trabajando para la humanidad
y el planeta, y que saben de nuestra existencia, aún sin haber tenido
pruebas palpables de ella, porque saben en su interior que están
siendo ayudados por civilizaciones planetarias fuera de este mundo. ¿Y
por qué tantos y tantos de ustedes tienen esa misteriosa seguridad de
que nosotros estamos aquí, a pesar de que aún no nos hemos presentado
formalmente? Ya saben, “Hola, soy Kryon, soy SaLuSa, soy Ashrar
Sheran, soy Silisio, de tal o cual sistema planetario” – “Hola, pues
yo soy Alex, Mauricio, María o Jennifer, y hemos nacido en este
planeta”. Algo así, ¿verdad?
Bien, ¿no se han parado a pensar por qué tienen esa absoluta certeza
de nuestra presencia y asistencia, si no ha habido tales
presentaciones en el plano físico? Medítenlo. Reflexionen sobre ello.
¿Y por qué otras personas, a veces dotadas de gran inteligencia, e
incluso que tienen cierto conocimiento espiritual en general,
simplemente no creen en nosotros o hacen comentarios peyorativos como
“¡Oh, a mí no me hables de marcianos, ya tengo bastantes problemas que
resolver aquí en la Tierra!” (Como si nosotros estuviéramos aquí para
ocasionarles problemas a ustedes, ¡válgame Dios!). Todas esas
conversaciones las conocemos y somos conscientes de ellas, porque las
monitorizamos desde nuestras naves, y por ello los conocemos a todos y
cada uno de ustedes muy bien, ¡más de lo que ustedes creen! Por eso,
es cierto que estamos cerca, muy cerca de ustedes, ¡tanto como su
corazón!
Y los invito a otra reflexión, ¿por qué la mayoría de ustedes, los que
leen nuestros mensajes porque sienten su veracidad, se han sentido
siempre como extraños en un mundo cuyo sistema de valores y cuyo modo
de operar no corresponden con lo que ustedes piensan que debería ser?
Muchos otros se plantean toda su vida bajo el marco de esta existencia
terrestre y se sienten cómodos y habituados a la forma de vivir de la
Tierra. En cambio, muchos otros, como usted, que está leyendo ahora
este mensaje, se ha sentido siempre extraño aquí, descontento con cómo
vive y piensa la gente de este planeta. ¿A qué creen ustedes que se
debe este hecho?
Y ahora la explicación.
Desde hace décadas algunos seres de diferentes mundos están trabajando
para preparar a la humanidad de la Tierra, actuando de forma
indetectable y anónima dentro de su sociedad. Ellos están un tiempo
entre ustedes, interactuando con algunos de ustedes sin que sean
conscientes de ello, y cuando finalizan su cometido regresan a
nuestras naves. Estos visitantes esporádicos rara vez muestran su
identidad a algunos de ustedes, pero en algunos casos sí, si su misión
así lo amerita. Pero lo más habitual es que cumplan su trabajo
actuando de incógnito en esa ciudad, pueblo o aldea donde hayan
acudido para determinada misión.
Después, tenemos el otro caso, más común que el anterior, en que
muchos de ustedes hayan venido con nosotros en nuestras naves de
transporte a esta coordenada de tiempo y espacio, pero que tengan una
misión mucho más amplia y de realización más prolongada que los que
mencionamos antes. En este caso, encarnan en una forma física de esta
humanidad, entrando en la matriz de su madre como los demás seres de
esta humanidad, viviendo el nacimiento y la educación de cualquier
niño de este género humano, con una madre y un padre terrestres, sin
despertar ninguna sospecha entre los demás humanos que los rodean.
Los demás los verán a ellos como iguales, pero ellos siempre se
sentirán extraños aquí, y en el fondo de ellos mismos, no se verán
iguales a los demás que les rodean. Buscarán hacer amistad con
personas que piensen y sientan como ellos (y ahora con internet esta
posibilidad está más a su alcance) y sólo se sentirán cómodos hablando
de temas como de “ovnis”, de sucesos paranormales o de ángeles y otros
seres de luz. Y los temas que entusiasman a las personas oriundas de
este planeta, tales como deportes, política o las vidas de los
famosos, a ellos les aburrirán mortalmente.
Espero haber ayudado, a que alguno que otro de ustedes se haya sentido
identificado con el último grupo que hemos tratado hoy. Esa es una de
nuestras misiones, muy satisfactoria por cierto: la de ayudarles a
conocerse mejor a ustedes mismos, dándoles pistas sobre cuál es su
origen, así como lo que pueden hacer para activar ciertas herramientas
que tienen en su interior y que los capacitará para llevar a cabo su
trabajo respectivo, con mayor efectividad y con más entusiasmo.
Me despido por ahora, deseándoles que pasen un buen día. Y por
supuesto, que tengan una feliz reflexión tras leer este mensaje.
Paz y Amor
http://navealfacastellano.blogspot.com/
ustedes hacia el conocimiento de nuestra existencia en primer lugar y
luego de cuáles son nuestras acciones y nuestro propósito en este
planeta, está llegando a un momento crucial de extremada importancia.
La Nave Alfa tiene una misión que cumplir dentro del Plan Divino de
suma importancia, y a medida que vayamos pasando a etapas posteriores
y subsecuentes podremos ir informándoles a ustedes a través de
internet, haciendo uso de esta herramienta tan útil para nuestro
propósito de hacerles llegar cada una de nuestras acciones, para que
sean conscientes de ellas.
Queremos hacerlo así, porque deseamos que todos ustedes, los seres
humanos que estén ya despiertos y los que van a ir despertando en
estos tiempos de cambio, entiendan que este cambio de la humanidad a
nivel planetario es algo que nos atañe a todos por igual, tanto los
que son oriundos de este planeta, como los que venimos de muy variadas
distancias siderales, todos juntos, unidos en un solo cuerpo, para
llevar a cabo el cambio dimensional que Dios ha planeado para ustedes
en estos momentos actuales.
Tenemos muchos y variados individuos en el planeta, actualmente
encarnados en un cuerpo físico, que están trabajando para la humanidad
y el planeta, y que saben de nuestra existencia, aún sin haber tenido
pruebas palpables de ella, porque saben en su interior que están
siendo ayudados por civilizaciones planetarias fuera de este mundo. ¿Y
por qué tantos y tantos de ustedes tienen esa misteriosa seguridad de
que nosotros estamos aquí, a pesar de que aún no nos hemos presentado
formalmente? Ya saben, “Hola, soy Kryon, soy SaLuSa, soy Ashrar
Sheran, soy Silisio, de tal o cual sistema planetario” – “Hola, pues
yo soy Alex, Mauricio, María o Jennifer, y hemos nacido en este
planeta”. Algo así, ¿verdad?
Bien, ¿no se han parado a pensar por qué tienen esa absoluta certeza
de nuestra presencia y asistencia, si no ha habido tales
presentaciones en el plano físico? Medítenlo. Reflexionen sobre ello.
¿Y por qué otras personas, a veces dotadas de gran inteligencia, e
incluso que tienen cierto conocimiento espiritual en general,
simplemente no creen en nosotros o hacen comentarios peyorativos como
“¡Oh, a mí no me hables de marcianos, ya tengo bastantes problemas que
resolver aquí en la Tierra!” (Como si nosotros estuviéramos aquí para
ocasionarles problemas a ustedes, ¡válgame Dios!). Todas esas
conversaciones las conocemos y somos conscientes de ellas, porque las
monitorizamos desde nuestras naves, y por ello los conocemos a todos y
cada uno de ustedes muy bien, ¡más de lo que ustedes creen! Por eso,
es cierto que estamos cerca, muy cerca de ustedes, ¡tanto como su
corazón!
Y los invito a otra reflexión, ¿por qué la mayoría de ustedes, los que
leen nuestros mensajes porque sienten su veracidad, se han sentido
siempre como extraños en un mundo cuyo sistema de valores y cuyo modo
de operar no corresponden con lo que ustedes piensan que debería ser?
Muchos otros se plantean toda su vida bajo el marco de esta existencia
terrestre y se sienten cómodos y habituados a la forma de vivir de la
Tierra. En cambio, muchos otros, como usted, que está leyendo ahora
este mensaje, se ha sentido siempre extraño aquí, descontento con cómo
vive y piensa la gente de este planeta. ¿A qué creen ustedes que se
debe este hecho?
Y ahora la explicación.
Desde hace décadas algunos seres de diferentes mundos están trabajando
para preparar a la humanidad de la Tierra, actuando de forma
indetectable y anónima dentro de su sociedad. Ellos están un tiempo
entre ustedes, interactuando con algunos de ustedes sin que sean
conscientes de ello, y cuando finalizan su cometido regresan a
nuestras naves. Estos visitantes esporádicos rara vez muestran su
identidad a algunos de ustedes, pero en algunos casos sí, si su misión
así lo amerita. Pero lo más habitual es que cumplan su trabajo
actuando de incógnito en esa ciudad, pueblo o aldea donde hayan
acudido para determinada misión.
Después, tenemos el otro caso, más común que el anterior, en que
muchos de ustedes hayan venido con nosotros en nuestras naves de
transporte a esta coordenada de tiempo y espacio, pero que tengan una
misión mucho más amplia y de realización más prolongada que los que
mencionamos antes. En este caso, encarnan en una forma física de esta
humanidad, entrando en la matriz de su madre como los demás seres de
esta humanidad, viviendo el nacimiento y la educación de cualquier
niño de este género humano, con una madre y un padre terrestres, sin
despertar ninguna sospecha entre los demás humanos que los rodean.
Los demás los verán a ellos como iguales, pero ellos siempre se
sentirán extraños aquí, y en el fondo de ellos mismos, no se verán
iguales a los demás que les rodean. Buscarán hacer amistad con
personas que piensen y sientan como ellos (y ahora con internet esta
posibilidad está más a su alcance) y sólo se sentirán cómodos hablando
de temas como de “ovnis”, de sucesos paranormales o de ángeles y otros
seres de luz. Y los temas que entusiasman a las personas oriundas de
este planeta, tales como deportes, política o las vidas de los
famosos, a ellos les aburrirán mortalmente.
Espero haber ayudado, a que alguno que otro de ustedes se haya sentido
identificado con el último grupo que hemos tratado hoy. Esa es una de
nuestras misiones, muy satisfactoria por cierto: la de ayudarles a
conocerse mejor a ustedes mismos, dándoles pistas sobre cuál es su
origen, así como lo que pueden hacer para activar ciertas herramientas
que tienen en su interior y que los capacitará para llevar a cabo su
trabajo respectivo, con mayor efectividad y con más entusiasmo.
Me despido por ahora, deseándoles que pasen un buen día. Y por
supuesto, que tengan una feliz reflexión tras leer este mensaje.
Paz y Amor
http://navealfacastellano.blogspot.com/
No hay comentarios:
Publicar un comentario