lunes, 27 de abril de 2009

Mensaje ARCÁNGEL MIGUEL -IX-

MIKAËL

25 de abril de 2009

Soy Mikaël, Príncipe y Regente de las Milicias Celestiales. Querría, antes de de inaugurar la primera transmisión de radiación de presión del ultravioleta, aportarles a ustedes aquí presentes y a todas las conciencias humanas unidas en lo que llamaría en las Bodas Celestiales, traducirles toda la gratitud de las distintas entidades espirituales, de las distintas entidades de Luz, de las distintas entidades personificadas de los mundos no disociados de tercera dimensión. Deseo precisar que no estoy solo. Que, de la misma forma, no están solos. Nuestra intervención y mis palabras se desarrollarán durante el tiempo anunciado. Aprovecharía de este tiempo anunciado para abrir tres espacios de nueva información completamente inédita, relativa al alma humano, su pasar a Ser, y también su historia. Bien amados Maestros, y aquí la más grande de las revelaciones que tengo que hacerles: hace mucho tiempo, antes de vivir estos ciclos de esta humanidad disociada, antes de hacer la experiencia de la disociación, ustedes eran todos, sin excepción, seres de pura Luz que habían decidido, tras un impulso comunicado por los Señores del Karma y también por algunas entidades que llaman Arcángeles, como Yo, participar con un sentido de sacrificio inaudito, en la ascensión de la transformación de la materia hacia un futuro. Esto fue hace mucho tiempo. Ustedes aquí ahora, han vuelto, en este tiempo, en su encarnación, en lo que llamo las Bodas Celestiales. Las Bodas Celestiales durarán 12 semanas. Durante estas 12 semanas el conjunto de sus potencialidades vinculadas a su historia, vinculadas con su Fuente y vinculadas con su pasar a Ser, aparecerán cada vez más claramente en su conciencia manifestada.

Lo anuncié, en mi primera llegada: que en este año de un período de 16 meses, anunciado como un período de reconstrucción, que este período de reconstrucción sería el preliminar necesario para su reencuentro con la Luz. Asuman que el período de reconstrucción que, a partir de esta noche, entrará enteramente en actividad sobre este planeta y sobre el conjunto de este sistema solar, no es ni un castigo, ni una recompensa sino una justa vuelta de la Luz, que firma el final de la disociación y el final de la experiencia de la encarnación. Ahora, les pido prepararse internamente a los momentos que van a seguir. Durante el conjunto de este período de tiempo asignado, vamos a transformarles de Portadores de Luz en Sembradores de Luz. Son, en este mundo, las semillas de eternidad en las cuales va a arraigarse, apoyarse y desarrollarse la nueva vida en la nueva dimensión. Sin embargo, el papel de Sembrador de Luz es un papel de despertar y de despertador, no de ustedes, sino de la totalidad de los aún dormidos, engañados por los juegos del ego y los juegos de la disociación, aún no revelando su potencial. Las efusiones de energía, las efusiones del ultravioleta que Yo libero, así como los Cónclaves, los Cenáculos, los Concilios, van a permitirles, durante estos períodos, en este período, como en los períodos posteriores, hacer desaparecer completamente los velos de la ignorancia, los velos de la separación y los velos de la ilusión. La Luz viene a encenderse, viene a revelar. Así pues, la Fuente (o Padre, si prefieren) les había hecho el juramento, así como usted le hizo el juramento. Son niños de la Unidad, niños de la Ley del Uno y es esto lo que, ahora, entra en manifestación. Mi intervención comienza.

... Efusión de Energía…

La transmisión de la presión de la radiación del ultravioleta durará, como se anuncia, 72 minutos. Dentro de este período de tiempo intervendré en tres ocasiones, durante un tiempo relativamente corto, a fin de darles, de revelarles la Verdad en cuanto a lo que son, en cuanto a lo que eran y por su parte, lo que van a pasar a ser. La revelación de la Verdad es posible por la acción de la Gracia, por la Comunión entre sus conciencias y nuestras conciencias, por decreto de la Fuente y por la Voluntad de Bien de la Luz. A cada una de mis intervenciones, así como de los otros participantes, a ustedes los comprometimos para que volvieran hacia su interior, a fin de ignorar la reconstrucción del mundo ya que la solución, la clave de su historia, de su alma, no puede encontrarse sino dentro ustedes, en el momento en que hicieron callar toda dualidad y la manifestación de personificación que ocupa su conciencia. Son peregrinos de la eternidad, son peregrinos de la Unidad y son, lo repito, enormes Maestros que habían hecho el sacrificio del olvido de su Divinidad con el fin de probar y realizar que era posible, incluso privado de la Fuente y de la Luz, de corresponder a la Luz. Los de ustedes, en el mundo, que han decidido adjuntarse en este momento en este día particular, van a avanzar a grandes pasos hacia el camino de su autorrealización. En este sentido, llamo estos períodos que van a vivir, y el período que viven, Bodas Celestiales. En efecto, se trata de momentos de alegría extrema, alegría última, alegría esencial que ningún acontecimiento exterior les debe deslustrar. La fuerza reside en la revelación de su Luz. Su fuerza reside en la transmisión de esta Luz. Así van los mundos. De la misma forma, en una asamblea y en reuniones espirituales múltiples resultantes de nuestras distintas dimensiones unificadas, venimos a su encuentro. Venimos a regarles de su Fuente. Venimos a restablecer la conexión a su Unidad, a su Divinidad y a su Control. Están más bien de lo que no se atreven a imaginar o esperar. Eso debe decirse. Eso debe realizarse. Eso debe revelarse. Y eso debe manifestarse. El control, la ascensión, la Luz, están exactamente en lo que son. La ilusión, creada por su juramento, finaliza irremediablemente en este día. Obviamente, reveladas las Luces, las zonas de sombra proyectadas a medida de sus encarnaciones en este espacio que llaman Tierra, no van a desmayarse de la noche a la mañana. Cualquiera que sean los acontecimientos vinculados a mi Presencia, en este sistema solar, que sean acontecimientos vinculados a las irradiaciones de Luz, a la presión de la radiación del ultravioleta, sólo deben conservar el espíritu de la Verdad última de lo que son y de lo que van a descubrir, por fin, sobre su dimensión real, sobre su Unidad real y sobre su poder creativo absoluto como co-creadores de este universo particular.

Así pues, almas humanas en encarnación, saludo en ustedes la gracia y la potencia de su viaje. Los saludo a ustedes compañeros de viaje que eligen avanzar en la separación y la división con el fin de reforzar su Luz interior. En la actualidad, a través de esta efusión, esta radiación del ultravioleta, se les ofrece su vuelta a su verdadera realidad. Cualesquiera que sean los acontecimientos de sus vidas materiales, personales, cualesquiera que sean las alegrías o las molestias que pueden ocurrir en este período de reconstrucción, no olviden nunca su Divinidad, su control, su verdad y su Unidad. La única verdad que deben guardar conscientes en su espíritu, en su conciencia, es ésta: son niños de la Ley del Uno, son niños del Eterno, son Luz pura. Sólo los velos vinculados a su juramento, querido por una determinada necesidad evolutiva, condujeron la Tierra a este estado de división, de separación que viven y vivirán cada vez más afuera. No deploren. Satisfáganse como seres de Luz que son. Satisfáganse de retransmitir lo que reciben de nuestros Cenáculos, nuestros Cónclaves y nuestras Reuniones. Van a convertirse en transmisores de la Luz después de haber revelado su dimensión. Las Bodas Celestiales corresponden a reencuentros celestiales y cósmicos. Eso se traduce en la desaparición total e irremediable de los velos que lo aislaban en esta dimensión. Van a encontrar una situación que es digna de su estatuto. Sin embargo, no juzguen nunca los de entre ustedes que tendrán aún que vivir la experiencia de su separación y la separación. Son tan evolucionados y respetables como ustedes. Son la misma Luz, la misma verdad y la misma Fuente. Sin embargo, algunas características de su Luz interior no permiten revelar ésta en este final de ciclo. Se les pide urgentemente no juzgar, no llevar mirada, cualquiera que sea, sino simplemente seguir amando, irradiando la Luz de la cual son portadores. Esta es la única condición absoluta para encontrar la totalidad de lo que son, a través de las efusiones, a través del ultravioleta, a través de los rayos de Luz que retransmitimos desde la Residencia de Paz Suprema: Shantinilaya.

Poco a poco les volverá la memoria de lo que Son, durante estas 12 semanas de Comunión y Bodas. Las velos de la ilusión, las velos de la separación se retirarán al Uno. Se convertirán en los Sembradores de Luz que sembrarán la nueva Tierra y los nuevos Cielos. Satisfáganse de vivir eso. No pretendan interferir, de ninguna manera, con sus hermanos que, cualquiera que sea la causa, hayan elegido volver de manera temporal la espalda a la Luz ya que, Yo lo garantizo a ustedes, son los mismos exactamente que ustedes pero, por razones que les son propias, tienen necesidad o tienen deseo de reforzar más aún su control ascendente. Así como lo dijo Cristo: “no juzguen”. Satisfáganse de irradiar la Luz de estas Bodas que vivimos. Satisfáganse de dedicar 72 minutos de cada semana a estas Bodas. Les invitamos, con toda la potencia de nuestro Amor, a adjuntarse cada vez más de ustedes a esta efusión de Luz particular, que viene a ustedes, para ustedes, y también para el conjunto de las formas de vida presentes en la superficie y dentro de este sistema solar. La confianza y el abandono que manifestarán hacia esta llamada de la Luz, hacia estas Bodas celestiales, les otorgará alegrías, un estado interior, que ninguna satisfacción material que conocen puede igualar. La Fuente de la alegría corresponde a estos momentos privilegiados de fusión. La Fuente de la Luz viene a despertar y despertar su Fuente. El papel de la Fuente es regar, irradiar, alimentar y encenderse. Esto va a convertirse en su papel, bien amados Maestros de Luz. Esta es la Primera Verdad de mi revelación. Vamos a permanecer algunos momentos en silencio con el fin de acoger la ola de la radiación que se intensifica ahora.

... Efusión de Energía…

Amados humanos en encarnación, bien amados Maestros de Luz, les anuncié que, durante este año y una parte de su año que viene, van a pasar de un Gobierno humano a un Gobierno espiritual, lo que significa que van a pasar de un poder humano a un poder espiritual. El poder humano vinculado a la personalidad, vinculado con el ego, vinculado con la socialidad, debe borrarse ante el poder espiritual. ¿Qué es el poder espiritual? Es la influencia directa de la conciencia de la Luz en su conciencia luminosa [humana]. Ésta se expresa sin pasar por sus herramientas habituales. Requiere la total supresión de todo rastro en ustedes de poder humano, cualquiera que sea y, en particular, el poder humano ejercido, de manera controlada o no, sobre otro ser humano. Siendo un ser de Luz, ningún otro ser de Luz puede imponerles su voluntad, su deseo o su forma de persuasión. Sólo el abandono a la Luz que es el poder espiritual, debe llevar y dirigir sus vidas. A partir del momento en que hayan comprendido, hayan integrado y hayan comenzado a vivir eso, se darán cuenta que la Luz crece en ustedes. ¿Qué pasa cuándo la Luz crece en ustedes?: se convierten en un ser de alegría. Se convierten en transmisores de Luz. Se darán cuenta que las emociones, señales de la actividad del ego humano, se reducen progresivamente y desaparecen para dejar el lugar a un estado de gracia o un estado de alegría interior independiente de sus propias emociones e independiente de sus propias circunstancias de vida. Resumidamente, su control se revelará a ustedes. El control no es el poder. El control no es la dificultad. El control es el abandono y la obtención de la liberación. El control es también la confianza que pondrán al vivir, con nosotros, estas Bodas Celestiales durante el período de 12 semanas que verá la reconstrucción intensificarse a un nivel que no pueden, solamente ahora, imaginar. En eso, deben desarrollar la confianza, la total confianza en nuestra contribución, en nuestros informes y en nuestros contactos, ya que la Luz no puede implicar ningún mal, ninguna desarmonía en los que la aceptan.

Obviamente, durante este período corren el riesgo de vivir períodos que llaman, en su lengua: eliminación. No concedan ninguna importancia a eso. Satisfáganse de recibir la Luz y retransmitirla. Este es su camino. Esto es una verdad esencial. Se nos ha separado siempre allí de ustedes, por los velos de la ilusión y por los velos de la disociación. Este estado de hecho finaliza, completamente. Es decir, la Luz, la ayuda de otros seres luminosos de alma humana personificada, está a su disposición, a su lado para acompañarles (por su vibración, su presencia, su potencia, su radiación) a ir completamente hacia su Templo Interior, en su seguridad interior y en el ser de Luz que ustedes Son. Pueden, y deben, recurrir nosotros. Cuando digo “nosotros”, se trata también efectivamente de mi presencia, de mi radiación, de la presencia y la radiación del conjunto de Melchizedech, del conjunto de los Ángeles del Señor y el conjunto de las energías Arcangélicas. A través de la demanda, reforzarán las Bodas Celestiales. A través de la demanda, reforzarán la reunión a su control, reforzarán su abandono a la Luz. Amados humanos en encarnación, ésta fue la Segunda Verdad. Vivimos ahora un segundo nivel de efusión.

... Efusión de Energía…

Amados humanos en encarnación, bien queridos Maestros de Luz, la desaparición de los velos de la ilusión y la separación les permitirá vivir en conciencia su futuro y su pasar a Ser ya que, a partir de un determinado límite máximo de despertar de Luz en ustedes, la ilusión del tiempo desaparece. La desaparición de la ilusión del tiempo les permitirá asumir que la Ascensión es una transición y no una muerte ya que, en la transición de la Ascensión, no hay olvido sino, al contrario, despertar total. Algunas imágenes, percepciones, sensaciones, se les revelarán a su conciencia despertada y les mostrarán su pasar a Ser como seres de Luz, como seres de Cristal o seres de Diamante, según su dimensión previa a la pendiente en la separación. Estas visiones, estas percepciones, estas sensaciones les permitirán hacer crecer la fe en su futuro de Luz, cualesquiera que sean los acontecimientos desagradables que sus percepciones humanas, que sus sentidos humanos, les darán a ver. Lo que deben considerar y verán, simplemente y de manera justa, es como operan acontecimientos vinculados a la penetración de la Luz, en el seno de las capas más densas del humano y de la Tierra. Ninguna fuerza, repito, ninguna fuerza opuesta a la Luz puede oponerse a la Luz. La Luz es el único vencedor irremediablemente, de la ilusión y la vida. El resto no son más que proyecciones de miedo, aprehensión y angustia. Ciertamente lógicos, comprensibles y aceptables, al menos mientras no se hayan incorporado a la fuente de Paz Suprema es decir, su corazón. Comprenderán, y vivirán, lo que Son (de manera intermitente en primer lugar, como en un sueño y, progresivamente, de manera cada vez más lúcida, concreta y real), su verdadera dimensión. Esto facilitará en gran parte la estabilización de la Luz en sus organismos y también el fenómeno de la transición y el fenómeno de la Ascensión. Como ya saben, esto no es inmediatamente para todos, excepto para un contingente de almas humanas, Maestros realizados de la Luz auténtica, que decidirán, a su plena voluntad, subir sin el cuerpo. Lo que llamarán la muerte será para ellos la resurrección. Esto debe ocurrir, como ya se sabe, entre ahora y su mes de junio. Eso es posible por la potencia de los elementos que activo y revelo sobre este mundo y en los otros mundos de este sistema solar. Así pues, no se trata de un período de luto, no se trata de un período de pérdida sino de un período de alegría intenso para sus hermanos y hermanas que accederán por fin a su eternidad y de manera duradera. Sin embargo, la mayoría de entre ustedes, Maestros de Luz realizados o en paso a ser, deben, diría, beber el corte hasta el final. Esto no es ni un castigo ni una recompensa, pero tenemos necesidad de los Sembradores de Luz que ustedes van pasando a ser, con el fin de permitir la ascensión de sus hermano y hermanas, humanos o no, y también para permitir la traslación y la transición del conjunto de este sistema solar. Sin ustedes, no podemos hacer nada. Esto es una Verdad Absoluta.

Así pues, les pedimos, y les pediremos sin descanso, llamarnos, pedirnos, no tanto cosas a nivel humano, sino más bien comulgar con nosotros con el fin de reforzar este período tan importante de sus Bodas Celestiales. Esto es ahora, esto comienza hoy, esto no está a un año, esto no está a diez años, esto no está a una generación sino ahora y hablo en el tiempo humano y no en tiempo espiritual. ¿Por qué? Porque hay una concordancia, debido a la afluencia de la Luz, entre el tiempo espiritual tan distante del suyo y el tiempo humano. El tiempo humano y el tiempo espiritual se juntan, para los que lo desean, para los de entre ustedes a quienes el momento del despertar y la realización vino. A lo sumo, serán más numerosos los llamados a participar en estas Bodas Celestiales semanales: a muchos más llegaremos a favorecer la transición y la ascensión en un mayor número. Por última vez, no se detengan en el estruendo del mundo que viene. La sombra nunca podrá ganar la menor batalla. Sólo la ilusión del tiempo, solamente la ilusión de su separación, pudo hacer creer que la sombra existía. Muchos de los pocos sobre este planeta, que dedicaron su destino a la sombra, son más aún que ustedes en el sentido del sacrificio. Así pues, estos seres allí no deben ni juzgarse, ni condenarse sino simplemente amarse. Las Bodas Celestiales son también los momentos de la revelación del Amor, la Unidad y la Luz. Se les ama de toda eternidad ya que son Amor. Pero, desgraciadamente, numerosas almas humanas se dejaron dormir más aún por las sirenas del placer, cualquiera que sea, y, esto, dura desde hace mucho tiempo, en este ciclo de humanidad. Sin embargo, todo esto, vinculado a los juegos de poder, a los juegos de la ilusión, a los juegos de la oscuridad, van a ser irremediablemente disueltos por la potencia del Amor y por la radiación de la residencia de la Paz Suprema.

Lo que observan no es, en metafórica, más que el tormento del parto y el parto mismo. Una vez que el parto haya tenido lugar, podrán observar estos momentos con paz, con serenidad ya que, entonces, habrán pasado a Ser lo que dejaron de ser, por juramento. La hora de las Bodas, la hora de los reencuentros es ahora. Tendrán la impresión, a la salida de este período de Bodas (que es como un período de gestación), la posibilidad, de vivir de manera muy natural, a la vez en este mundo (y en consecuencia sobre este mundo) y también en el mundo futuro, en un mundo de Luz donde la sombra no puede subsistir. Este aprendizaje de la puesta a caballo en dos dimensiones, es también una forma de educación y control de su nueva Luz, revelada a ustedes. Los próximos momentos para que, cada vez un mayor numeroso de Portadores de Luz se adjunten y se junten, serán el 2 de mayo a las 15h30 y el 9 de mayo a 16h30 [hora de Francia -son 6 horas y media menos con Venezuela]. Guardamos silencio ahora, algunos momentos, de nuevo, a fin de dejar infundirse a una octava superior, de la radiación ultravioleta. Deben acoger este presente y esta Luz en su corazón.

... Efusión de Energía…

Un último punto: había dicho que a cada una de mis intervenciones, en adelante, les revelaré una función nueva de cada uno de sus filamentos de ADN , vinculada a las doce virtudes del alma o también a las doce estrellas de María. La primera estrella (o su tercer filamento de ADN) está vinculada a la ley de atracción que llaman Amor. Pasar del dos al tres permite solucionar la dualidad en una nueva triunidad. La segunda estrella (o cuarto filamento de ADN) está vinculada al abandono a la Luz. El abandono a la Luz es el testigo de su fe y su lealtad a la Fuente y a la Luz de la cual son parte involucrada. Es el acuerdo a sí mismos. Eso corresponde plenamente al período que viven y, por lo tanto, a las Bodas Celestiales.

Vamos ahora a permanecer, ustedes aquí presentes, algunos momentos en la transmisión de la radiación ultravioleta, en silencio. A continuación, les presento mi homenaje y les dejaré en este estado por el tiempo que les queda por cubrir. Ya, reciben toda mi protección, todo el Amor de los seres espirituales que trabajan en la aparición de la Luz en este mundo. Acojan...

... Efusión de Energía…

Dondequiera que esten en La Tierra, reciban protección, bendición. Son la esperanza del mundo, son la Verdad en marcha. Son bendecidos y les digo, hasta nuestro próximo encuentro. Sigan viviendo ahora, en silencio, la transmisión de la Residencia de Paz Suprema.

Traducción libre. Original francés:
http://www.autresdimensions.com/article.php?produit=292


Comentario :
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QUERIDOS HERMANOS EN LA LUZ:



Quienes hemos tenido la Gracia de conectar con la primera sesión de las “Bodas Celestiales”, no tenemos palabras para describir con total exactitud el detalle y plenitud de las sensaciones y vivencias experimentadas antes, en y después de tan extasiante momento… Sin duda, una experiencia personal que cada quien asimilará para su “kilometraje” existencial, ya en estos momentos decisorios en la realización del Plan Divino..



Solamente quería hacer referencia a los aspectos siguientes del mensaje de esta semana:


o Cuando se hace la referencia al “no juzguen”, lo entiendo referido a la expresión de El Cristo: “…quien esté libre de pecado que lance la primera piedra…”


o La referencia a la “eliminación”, se entiende como esos períodos más o menos constantes, de mayor o menor intensidad, cuando experimentamos diversos síntomas o malestares de los relacionados con el proceso de ascensión de nuestro cuerpo físico, que incluye entre otros, liberación de toxinas celulares y de desechos corporales por los mecanismos regulares y energéticos de nuestra fisiología…


o En lo referente a los Maestros de Luz que abandonarán sus cuerpos físicos en este período, solamente traigo a colación que, de acuerdo a otras informaciones analizadas en contexto, podría esperarse en un futuro, un momento en el cual exista coexistencia de seres de tercera dimensión unificada con seres en cuerpo de Luz, los cuales a su vez, también podrán optar por disponer de un cuerpo físico ascendido.


QUE LA LUZ NOS GUÍE EN TODO MOMENTO!


Solstrom